Es un trabajo psicoterapéutico personal, enmarcado en el autodescubrimiento, dentro de los cuatro centros que Alejandro Jodorowsky señala en sus fundamentos de Psicogenealogía, ellos son: Intelectual, Emocional, Sexual-Creativo y Material.
Por la profundidad de su toma de consciencia y la acción que se genera en el proceso de sanación, desarrollado en este trabajo, me atrevo a decir, que reduce mucho, el número de sesiones psicológicas de cualquier especialidad. Ya que cuando estamos buscando respuestas a nuestros conflictos internos, que generan algún malestar psicológico como: inconformidad, ansiedad, desaliento, apatía, etc, regularmente nos adentramos en un largo recorrido de sesiones psicoanaliticas que muchas veces no logran encajar los hechos que nos suceden. Esta propuesta, invita a iniciar el proceso armando el puzzler de nuestro árbol genealógico.
Comparto la idea de Alejandro Jodorowsky, al decir que la Psicogenealogía será uno de los temas de estudio mas significativos en este nuevo siglo, creando una revolución psicológica, con su enfoque de analisis. Especialmente la Psicogenealogía Jodorowskyana, la cual desde mi punto de vista, tiene un encuadre mas integral en donde trata no solo la toma de Conciencia, sino que también presenta herramientas para la sanación del árbol, y por ende de nuestros conflictos, sosteniendo que si queremos saber quienes somos, tenemos que estudiar nuestro árbol hasta nuestros bisabuelos.
Estudiar la familia es activar un reencuentro con nuestros orígenes, con nuestro clan, es definir el sentido de pertenencia. Siendo lo mas importante el realizar el contacto desde la sanación, la cual es una de las finalidades fundamentales para todos aquellos que deseamos crecer.
Sanar y Crecer es el objetivo y para ello, lo mejor es partir del origen.
Es importante hacer notar que en la actualidad los modelos familiar van cambiando, ahora tenemos un abanico amplio de modelos, en donde cada uno presenta realidades distintas dentro de sus interacciones personales. Nuestra realidad personal, está ligada a la realidad de nuestra familia. Si conocemos su formación, sus crisis, así como sus obstáculos y logros que han tenido, nos conoceremos mejor nosotros mismos. Ya que la familia somos nosotros, la familia vive en nuestro cuerpo.